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Por la inquietud de conocer un poco de los pioneros de la fotografía de prensa en Panamá, hemos recopilado la información del Suplemento Epocas y deseamos compartirla con usted, en el marco del Centenario de la República de Panamá. Hay otras informaciones, que compartiremos en otra oportunidad...
Entre los pioneros de la fotografía de prensa en Panamá se pueden mencionar a los fotógrafos Inocente Artavia, Vicente Coutte y a Dominicano González, figuras muy reconocidas en los ámbitos periodísticos en la República en Panamá.
El fotoperiodista Inocente Artavia nació en Cinco Esquinas de Tibás, poblado cercano a San José, el 24 de enero de 1919. Aprendió fotografía en el primer taller de aficionados de la capital josefina. En 1941 llegó a Panamá, a trabajar en la antigua Zonal del Canal. Laboró en Fuerte Kobe, Corozal y Paraíso como operador de los laboratorios de revelado e impresión de fotografías.
En la República de Panamá, Artavia trabajó durante 17 años, dedicados a la fotografía de prensa, durante su instancia en nuestro país laboró con el Sr. Samuel Lewis Arango en el Semanario Mundo Gráfico, en la Revista Épocas, en Foto Sport, de propiedad de un alemán y un austríaco. "Fueron excelentes maestros". Recuerda Artavia a León Green y a George Salvar como los concesionarios de estos negocios. Al finalizar la Segunda Guerra Mundial se vinculó con la prensa panameña. Colaboró con Mundo Gráfico, La Estrella de Panamá, El Panamá América, y la Hora.
Según el propio Artavia, él no se dedicó a la fotografía de estudio, prefería estar en contacto directo con la acción, ser parte del suceso. Su cámara captó importantes acontecimientos, políticos, culturales, sociales y deportivos. Narró gráficamente los trágicos sucesos de mayo de 1951 que terminaron con el derrocamiento del Dr. Arnulfo Arias. Registró la visita del General Dwight Eisenhower a nuestro país en agosto de 1946. La portada de la Revista Épocas de septiembre de 1946, obra de Artavia que está dedicada a esta visita. Cubrió la llegada de la Reina Isabel II de Inglaterra en noviembre de 1953. Dejó una importante secuencia de la reunión de los Jefes de Estado de este Hemisferio y de los miembros del Consejo de la Organización de Estados Americanos celebrada en 1956, con motivo del 130 Aniversario del Congreso Anfictiónico de Panamá.
Aquí se asoció con otros importantes fotógrafos de prensa: Vicente Coutte, ya fallecido y con su paisano Jorge Noguera, hoy con su paisano Jorge Noguera, residente en Costa Rica. En 1958 regresó a su país natal. Dejó la fotografía en manos del también fotógrafo Andrés Castillo, su colaborador por varios años.
Hoy jubilado, se dedica esporádicamente a la fotografía, profesión que ha continuado su hijo Oscar Mariano Artavia. En un principio se opuso a que sus hijos fueran fotógrafos, quizá recordando lo difícil y trabajoso que en aquélla época significaba ser fotógrafo de prensa. No había las comodidades actuales para transportarse de un lugar a otro, ni existían equipos tan sofisticados de revelado, etc. Para entregar a tiempo una fotografía para el periódico había que hacer mil peripecias. Debido al estrés consiguió una úlcera que lo afectó por muchos años.
Datos del autor:
Vicente Coutte Torres, es otro fotógrafo de prensa, nació en la ciudad de Panamá el 2 de julio de 1916. Desde muy joven mostró interés por la fotografía, carrera que inició en Foto Ansco, ubicada entre Calle 50 y Avenida Justo Arosemena.
En 1941, comenzó a trabajar en el diario El Panamá América, primero como redactor de noticias, después como reportero gráfico. Fue fotógrafo fundador de los diarios La Hora, El Día y Crítica. Su primer estudio estuvo en el Edificio Vergara, situado entre las Calles 36 y 37 y Avenida Perú.
En mayo de 1951, a raíz del derrocamiento del Dr. Arnulfo Arias Madrid, Coutte su gran amigo y seguidor, pasó cuatro meses en prisión. El estudio de Vergara fue desalojado, perdió todo, sus equipos, archivos fotográficos y enseres fueron lanzados a la calle.
Asociado con Inocente Artavia, fundan la firma Coutte-Artavia, amplían la fotografía de prensa a eventos sociales tales como bodas, cumpleaños y fiestas comerciales. En 1956, se disuelve la sociedad y va a trabajar con Manuel Sánchez Duran.
En 1958 montó un laboratorio en Calle 4° en el inmueble donde funcionaba el Club Santo Domingo.
En 1960, se trasladó a Santiago de Veraguas y abrió Foto Coutte. Sirvió de corresponsal a la mayoría de los periódicos de aquélla época. Allí fue Secretario y Jefe de Zona del Club de Leones donde fue premiado por los valiosos servicios prestados. En Santiago de Veraguas operó hasta 1968. A raíz del golpe militar de ese año, que derrocó por tercera vez al Dr. Arnulfo Arias, Coutte estuvo nuevamente en prisión, esta vez por ocho meses. Su hijo Rafael, también fotógrafo profesional, continuó a cargo del negocio.
A mediados de 1969, abren en la ciudad capital Foto Servicio Coutte, dedicado al revelado de los productos Kodak. Este negocio funcionó alrededor de seis años.
Don Vicente Coutte, murió en la ciudad de Panamá, el 8 de agosto de 1991. Su hijo Rafael dejó la fotografía y se dedicó al comercio.
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Domiciano González, nació en La Peña, Provincia de Veraguas, el día 28 de diciembre de 1923. A los 16 años se trasladó a la ciudad capital. Laboró como ayudante de carpintero en la Zonal del Canal, trabajó como salonero en el Jardín Atlas. Aquí conoció a Mendoza, fotógrafo español quién le enseñó diversas técnicas de la fotografía, en sus ratos libres, por un periodo de año y medio.
En 1943 su maestro Mendoza abrió Foto Lúmina, estudio que estuvo ubicado en Calle 16, frente al Teatro Edison y el cual lo invitó a trabajar con él, oferta que aceptó.
Eran los años de la Segunda Guerra Mundial y la afluencia de gente y dinero era muy grande. Tomando fotografías en la Plaza Cinco de Mayo, de una a seis de la tarde, ganaba un promedio de B/ 25.00 diarios, mucho dinero en aquella época.
De Mendoza a quien evocó con mucho cariño, comentó: "Siempre me decía: si aprendes fotografía algún día serás fotógrafo oficial de la campaña presidencial de Don Enrique Jiménez. A finales de 1940, el fotógrafo Mendoza viajó hacia Venezuela y nunca más se supo de él.
Domiciano González en 1948 abrió su primer estudio: Foto Domy, ubicado en la Calle Mariano Arosemena. De aquí se mudó a la Avenida Arosemena, donde actualmente se encuentra el Hotel Roma, con mejores equipos y mayor clientela.
En 1953 le vendió el negocio al conocido fotógrafo Julio García quién continuó con Foto Domy en la ciudad capital. Domiciano se trasladó a Santiago de Veraguas donde compró Foto Artística de propiedad de Santiago Marín y le cambió el nombre a Foto Domy. En esta ciudad contrajo matrimonio con doña María Bruda Hernandez. Expandió el negocio a Chitaré donde abrió Foto Domy N°2. , Y al año siguiente, la vendió. Viajó a David, Chiriquí,; en donde encontró mercado suficiente y abrió Foto Domy en un local del Edificio Don Enrique. Al cabo de unos años se mudó al Edificio Plaza Valiña. Fué el primer fotógrafo que trabajó en compañía de 5 socios un laboratorio a colores en Chiriquí, el cual le llamó Barucolor.
Domiciano González lleva en David más de cuarenta años y continua con la fotografía, profesión que comparte con sus hijos Domiciano Jr., Julio Ernesto y María Bruda González Hernandez.
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Manuel Fernández, nació el 24 de diciembre de 1924, en Bijagual, comunidad del Distrito de Antón, Provincia de Coclé, hijo de Carlos Fernández y Rosa Jaramillo.
A los once años se cayó de un caballo, accidente que lo dejó lisiado de por vida de un brazo y una pierna; de ahí el apodo de "El cojito Fernández". A raíz de aquél percance se radicó en la ciudad capital. Escogió como oficio la joyería y se inició como "remendón de prendas", llegó a ser un experto evaluador de joyas. Trabajó con los hermanos Francisco y Pascual Ditrani y Angelo Galante, joyeros oriundos de Moliterno, Italia, cuna de los Latorraca, Melillo, Espósito, Petrocelli, Lapenta, Lagruta, Viggiano, Magglione y de ese otro gran fotógrafo que fue Don Guissepe Laurenza.
Al iniciarse la Segunda Guerra Mundial, las autoridades panameñas, mediante Decreto N°.127 de 10 de diciembre de 1941, adoptaron severas medidas en contra de los nacionales de aquellos países "enemigos o aliados de los enemigos". El Decreto hacia referencia a los japoneses, alemanes e italianos. Los Ditrani y Galante fueron hechos prisioneros. Estos le confiaron a Fernández la caja fuerte que contenía las joyas y valores del negocio. Según Fernández, él trasladó las joyas a su casa donde permaneció por cuatro años a su cuidado. Al quedar sus propietarios en libertad, los devolvió el tesoro intacto, gesto que siempre le agradecieron.
En los años que estuvo cerrada la joyería, laboró en el Almacén Novedades La Innovación, de Gustavo Trius. Era el gerente Saturnino Arosemena, quién, en compañía de su esposa Josefina Alba, lo educaron como a un hijo.
Su afición por la fotografía se inició en los años 40. Se acuerda haber fotografiado al Dr. Arnulfo Arias, depositando su voto en las elecciones presidenciales de 1940, en que resultó victorioso.
Manuel Fernández tuvo como maestro de la fotografía a Manuel Sánchez Duran y como inspiración Lucky Fergunson, considerado la estrella del periodismo gráfico. Aprendió mucho de Orestes "Chino" Cabredo, Alfonso Gómez Santos y Domiciano González.
Comentó Fernández, que de sus primeros años como fotógrafo guarda especial agradecimiento aquéllas personas que le dieron la mano, entre las que recuerda a Raúl (Lul) Arango, Don Carlos (Cuco) Bermúdez y a Don Camilo Porras, éste último le vendió una Leika M-3 en B/300.00. El cual se la dio fiada para que la pagara como poco a poco.
Según Fernández, sus años como joyero los compartió con la fotografía. Recuerda muchas anécdotas, y comenta: "Siendo Presidente de la República el Coronel José Antonio Remón Cantera, me entregó un anillo de brillantes para que se lo limpiara. Por esos días iba Remón en compañía de su Gabinete a Chiriquí a inaugurar varias obras. Su fotógrafo oficial, Manuel Sánchez, se encontraba hospitalizado y Remón, conocedor de mis habilidades en la Fotografía, me invitó acompañarlos." Tomó varias fotografías del evento de las cuales, seis de ellas fueron escogidas por Sánchez Duran y publicadas en La Estrella de Panamá.
Agrega Fernández, "estando el ex Presidente de la República José Ramón Guizado detenido en la Cárcel Modelo en su condición de preso político, me informaron que de 8:00 a 8:30 de la mañana salía a la azotea a hacer ejercicios. Una noche sin que nadie se percatara se subió al techo de la Corregiduría de El Chorrillo, contigua a la cárcel. Allí permaneció hasta la mañana siguiente y captó a Ramón Guizado realizando sus ejercicios matinales. Al quedar en libertad le mostró la fotografía, la cual se la dedicó así: "a un fotógrafo audaz".
Fernández fotografió a varios Presidentes de la República, tales como: Ricardo Arias Espinosa, Ernesto de la Guardia, Roberto F. Chiari y Marcos Robles, también fotografió a dignatarios latinoamericanos, entre los que recordó a Otilio Ulate, Orlich y José Figueres de Costa Rica, a Prados y Belaunde Terry de Perú, y a Fidel Castro, de Cuba. También tuvo la suerte de conocer y fotografiar a Margot Fontain quien en una ocasión fue a Bijagual a visitarlo en compañía de su esposo Tito Arias.
Sus fotografías fueron publicadas en la mayoría de los periódicos y revistas de la época: La Hora, Crítica, El Panamá América, La Estrella de Panamá y en la Revista Lotería.
Trabajó por varios años en la Revista Flash, que dirigió el periodista Guillermo Rodolfo Valdés, cuyas oficinas estaban en la Ave. Cuba y Calle 29, éste cambió de propietario y sus oficinas fueron trasladadas a otra ubicación; fue entonces cuando Fernández decidió abrir su propio negocio, arrendó dicho local e inauguró Foto Fernández, eran los años de 1959, y desde entonces queda en el mismo lugar, hoy bajo la dirección de su hijo y también fotógrafo Manuel Fernández Jr.
Las fotografías de Fernández, por varios años fueron galardonadas con el premio de prensa: 1960, 1961, 1962, y 1963. Gracias a estos concursos llegó a conocer a casi todo el Continente Americano. Recordó, que por recomendación de Don Roberto F. Chiari se abstuvo de seguir participando. El cual le dijo en una oportunidad: hay que darle paso a los nuevos fotógrafos.
Sus mejores logros como fotógrafo se dieron en el año 1963. Ganó mención honorífica en el Pruzen World Press Photo, con "Explosión en la Bahía". En este concurso participaron 3325 fotógrafos de todo el mundo. Fernández ocupó el décimo lugar. De esta fotografía recuerda que lo llamó Don Felipe Motta para informarme que en la bahía se estaba incendiando un barco lleno de combustible y que quizá le interesaba registrar el acontecimiento. Cuando llegó al sitio, toda la prensa estaba pendiente del fuego, pero fue la cámara de Fernández la que captó la explosión. Gracias a esta fotografía recorrió gran parte de Europa, viaje que se inició en Holanda, donde fue a recoger el premio.
El artista Eugenio Dunn, pintó un óleo basado en la fotografía de la explosión, cuadro que Fernández conserva en su residencia de Bijagual.
Otro de los éxitos de Fernández como fotógrafo se dio en la Reunión de Presidentes de Centro América, Panamá y los Estados Unidos, que tuvo lugar en San José de Costa Rica del 17 al 20 de marzo de 1963. La Revista Lotería dedicó sus números 88 y 89 a la histórica reunión. Ilustraron la publicación cerca de 105 fotografías de las cuales 103 se deben a Manuel Fernández, quien tomó en Panamá y Costa Rica, las gráficas que aparecen en esta edición. La portada se debe a Roa, de Costa Rica, y la contraportada a Bultrón, de Panamá.
De esta serie de fotografías hay una que recuerda con especial interés, donde aparece el Presidente de Panamá Don Roberto F. Chiari despidiéndose de su colega John F. Kennedy de los Estados Unidos y en el centro el Embajador de los Estados Unidos en Panamá, Sr. Joseph Farland, amigo personal de Fernández.
Incursionó con éxito en la compleja y arriesgada "fotografía taurina", que aprendió de "Morenito" un español que vino a Panamá como banderillero del famoso torero Dominguín. "Morenito" se quedó en Panamá, viviendo en la Aguadulce, Provincia de Herrera.
Manuel Fernández se siente complacido no sólo por sus logros como fotógrafo, sino por haber "dejado una buena escuela". Le enseño a Eliécer Santamaría, merecedor de varios premios de prensa; a mis hermanos Tomás, por varios años fotógrafo de La Estrella de Panamá y a Francisca. A mis hijos Dioselina, quien fue reportera de prensa y a Manuel Jr. hoy al frente de Foto Fernández.
En 1977, Manuel Fernández abandona la profesión de fotógrafo y regresa a descansar a su comunidad natal, Bijagual, de la Provincia de Coclé. Fuente: Información del Suplemento Épocas", Panamá, octubre de 1993.
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