Arte Visual
KOJAANISQATSI - 07/05/2003
KOJAANISQATSI
Estamos ciegos. Cegados por el futuro. No vemos nunca lo que está frente a nosotros,
nunca el próximo segundo, hasta que nos rompemos la nariz contra él.
Vemos sólo lo que hemos visto ya. Es decir, nada.(1)
La filosofía occidental ha impuesto al hombre las reglas para vivir, saber vivir, y aprender cómo morir sin tener siquiera conciencia de la muerte.
El viaje del hombre por el planeta azul se acerca cada vez más a su destino final, a un ciclo que contiene dentro del sentido de su cauce, los sin sentidos, las miradas sin allendes y la probabilidad de NO ser, ni de haber sido. Sólo de haber existido.
Kojaanisqatsi, el mensaje rupestre de los indios Hopi(2) , aquel en que la vida loca, la vida en un tumulto y en desintegración dan lugar al clamor de la tierra por otra forma de vivir(3), va más allá de una simple profecía lejana(4) . Gracias a la creatividad de Godfrey Reggio, este mensaje llega a través de lo improbable y lo intemporal –lo que subyace a lo humano-, para cuestionar al estado actual del mundo, de la tierra y de cada individuo que habita en ella, todo bajo la máscara del audiovisual que lleva el mismo nombre.
La competencia bélica, el stress cotidiano, la velocidad con la que se mueve el mundo del siglo XX, la búsqueda del ser en la vacuidad del mundo físico, y el caos que refleja la pasión humana al dejarse llevar por el placer de lo inmediato, son algunas de las figuras que la creación autoral de Reggio presentan para lograr la conjunción del mensaje primitivo con un mensaje de alerta roja hacia la modernidad.
Kojaanisqatsi(5) , NO enseña al espectador lo que ocurre en el mundo exterior, ni exhibe lo que la civilización occidental del hombre blanco busca por encima de las piedras. Kojaanisqatsi habla desde la voz de quien lo observa, de quien tiene esa sensación abismal dentro de sí que carcome la historia personal y hace culpable por complicidad, al ser que vive también en el viaje del y hacia el desequilibrio.
Una palabra podría nombrar a este documental al tildarlo como holista (6) . Cualquier perspectiva de análisis -desde los mitos milenarios hasta las teorías modernas más revolucionarias-, tienen cabida para otorgar validez a los conflictos presentados aquí. La historia natural, indica ya una representación humana de todo su contexto, su vida y las explicaciones del comportamiento del hombre, al ser exhibida en una serie de imágenes fálicas(7) , pétreas y sombrías, de caudales en ebullición y formas caprichosas, lo que termina de forma tajante con la aparición de la mano del hombre, cuyo rasgar sobre la tierra abre surcos y comienza la paradójica evasión del instinto de muerte disfrazado de la búsqueda de la supervivencia, que atenta progresivamente contra la muerte de la madre y a la vez contra la vida propia. Encontramos aquí a la conjunción del psicoanálisis, que de la mano con el papel de la música como transmisor de sensaciones y estados de ánimo, y la teoría que explica la cognición y lectura de imágenes seriadas: El montaje de Eisenstein, pueden transmitir este mensaje tan contundente para todo aquel que se expone a Kojanisqaatsi: La predicción del no lugar, del no espacio y de todo aquello que debemos considerar como cómplices de la vida loca.
Kojanisqaatsi puede ser catalogado dentro del género documental, aunque también se le considera como antecedente del video clip. Su sintaxis (8) está construida con base en imágenes metafóricas y textos no hablados, pero que se hacen evidentes gracias a la capacidad de asociación que poseemos los humanos. La música –excelsa obra de Phillip Glass- es el hilo conductor que expresa, a través de un estado sensorial consciente, las más aterradoras imágenes que el subconsciente se reserva. Esas imágenes son parte del imaginario que conocemos como una realidad, pero que aún a sabiendas de ello, vivimos en un estado de negación que obnubila la verdad de nuestra condición en la tierra. Aquí pareciera que la condición humana fuese todo, menos eso. El mundo del humanismo sin el toque humanitario, o quizás el mundo “humano, demasiado humano”.(9)
Kojaanisqatsi, invita a un proceso de desestructuración para el lector crítico de la imagen; para el lector lineal podrá ser incomprensible, pero probablemente sentirá la pesadez de su trasfondo crítico. La mirada de la realidad a partir de Kojaanisqatsi podrá cambiar en caso de dejarse someter a ella. La concepción de la sintaxis audiovisual traspasará el papel en el que está escrito el guión y reventará de la pantalla; reconfigurará la forma de leer la vida diaria en imágenes visuales y hará comprensible el significado de cada nota musical, de las series de ritmos naturales y artificiales y de las palabras que hacen falta para expresar la luz y el silencio.
FICHA TECNICA: Kojaanisqatsi.
REALIZACIÓN: Godfrey Reggio
PRODUCCIÓN: IRE prod./Reggio/Coppola
DIRECCIÓN: Godfrey Reggio
GUIÓN: Godfrey Reggio
EDICIÓN: Alton Walpole Ron Fricke
MÚSICA: Philip Glass
INVESTIGACIÓN: Godfrey Reggio
FOTOGRAFÍA: Ron Fricke
AÑO: 1975-1982
REFERENCIAS:
(1) Ende, Michael. “El espejo en el espejo”. Alfaguara, 1996.
(2) Indios Hopi: Extensa tribu habitante del suroeste de los Estados Unidos, con una larga tradición centenaria. Su actividad primordial es la agricultura y sus viviendas están conformadas por una serie de casas construidas de adobe. Son parientes raciales de los Navajo, pero sus costumbres y tradiciones difieren mucho. (**HORTON; HUNT. “Sociología”. Mc Graw Hill. E.U.A., 1998.)
(3) http://www.kojaanisqatsi.org
(4) ¿Por qué el mensaje del exceso de las profecías de la tribu Hopi y no las profecías del Budismo, o las enseñanzas de Jesús, o el temor a la venganza de la naturaleza propio de las tribus del Serengetti?. En cuestión de territorialidad, los Hopis claman desde más de cerca el escape al desequilibrio. Ellos viven justo en el corazón de la nación más poderosa de occidente, cuyo actuar ha caído en el descontrol ambiental, humano y espiritual más prolífico desde todos los tiempos. Han observado muy de cerca todo el monstruoso proceso de construcción del gigante de occidente. Si los mitos juzgan las verdades desde las lógicas naturales en función de su contexto, entonces quien juzga aquí no sólo es la mitología del mundo entero, sino la de los habitantes desterrados de occidente: los sabios que nacieron en el desierto y que fueron obligados a huir. Paul Horton explica esta diferencia como un conflicto de valores: “Los valores son ideas acerca de si las experiencias son o no importantes. En cada sociedad hay valores que son más estimados que otros. La puntualidad, el progreso material y la competencia (y sus consecuencias) son valores importantes en la sociedad estadounidense, en tanto que ninguno de estos es importante para los indígenas hopi** (Op. Cit.)”.Se habla entonces de un conflicto de visiones distintas, de un conflicto intercultural cuyas repercusiones deberemos pagar todos en la tierra por igual, aún y cuando esta diversidad enriquezca los puntos de vista, la dominación siempre escribirá la última palabra en tanto no exista la justicia social, natural o espiritual.
(5) KOJAANISQATSI es la primera parte de la trilogía Qatsi. POWAQQATSI, la segunda parte, fue completada en 1988. NAQOYQATSI, aún sin encontrar, completaría la trilogía. Así como KOJAANISQATSI se enfoca en el norte y POWAQQATSI en el sur, NAQOYQATSI tendría la tarea de proyectar ambas miradas en el mundo global. Con NAQOYQATSI, la trilogía Qatsi se presentaría como la declaración cinematográfica de un suceso innombrable– la transformación tecnológica del planeta-. (http://www.kojaanisqatsi.org/aboutus)
(6) Holista: (Holos) = Todo. Concepción de carácter mental-idealista que busca la integración de las cosmovisiones posibles de la realidad.
(7) Las imágenes fálicas aluden al filme “2001: Odisea del Espacio”, en el que la aparición de una piedra negra, no fálica en forma, pero sí en teoría, al lado del grupo de primates brinda la idea de que la representación de los órdenes naturales, la ley y el control se hacen a través de éstas figuras de imposición: Una vez encontrada la representación como tal y el temor a la misma, surge una idea de vacío que debe ser llenada con la idea del poder; de la mano que impone a otros y destruye violentamente, de quien toma el falo, el hueso y lo blande ante sus semejantes. Es aquí donde comienza el viaje lúdico de destrucción-poder que el hombre recorre también en Kojanisqaatsi.
(8) Este audiovisual contiene en su sintaxis la riqueza de las diversas formas existentes para dar sentido al documental: la impronta reflexiva, el movimiento fugaz del vértigo, todo lo que se dice tal como es y también aquello que no se dice.
(9) Nietsche, F.
Oscar Felipe Reyna Jiménez
8º semestre de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación Escuela de Ciencias de la Comunicación Universidad Autónoma de San Luis Potosí
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